Los sitios más fuertemente golpeados por un sismo son por lo general aquellos que se encuentran cerca de la falla que los origina. Sin embargo, esto no siempre es cierto ya que existe un fenómeno llamado efectos de sitio que tienden a amplificar la señal sísmica.

Aquellos lugares que se encuentren sobre sedimentos blandos como los valles aluviales (casa de la izquierda en la Figura 1) son los que experimentarán un movimiento mucho más fuerte que sitios sobre roca o suelos firmes (casa de la derecha en la Figura 1). Los sedimentos tienden a hacer que la amplitud de las ondas se incremente y que su período se alargue.

Figura 1.

También, dependiendo de la forma del valle o cuenca sedimentaria y de las irregularidades presentes en el basamento, las ondas podrían quedarse “atrapadas” y rebotar de un lado hacia otro, prolongando la duración del movimiento.